ANTECEDENTES La menor tasa de eventos de la variable principal de valoración en el grupo de tratamiento intensivo en el estudio SPRINT (Systolic Pressure Intervention Trial) se asoció a un aumento de los eventos adversos graves (EAG) clínicamente relevantes. En 2017, el American College of Cardiology y la American Heart Association publicaron una guía para el tratamiento de la presión arterial según el riesgo del paciente. Los autores plantearon la hipótesis de que una estratificación de la población del ensayo SPRINT según el riesgo futuro de enfermedad cardiovascular (ECV) podría identificar a un grupo de pacientes en los que se obtuviera el máximo efecto beneficioso con un tratamiento intensivo para la presión arterial.
OBJETIVOS En este estudio se investigó el efecto del riesgo basal de ECV a 10 años sobre los eventos de la variable principal de valoración y sobre los EAG de cualquier causa en el estudio SPRINT.
MÉTODOS Se utilizó una estratificación en cuartiles del riesgo basal de ECV a 10 años y se utilizaron modelos de riesgos proporcionales de Cox para examinar las asociaciones del grupo de tratamiento con los eventos de la variable principal de valoración y con los EAG. Con el empleo de una regresión de Poisson multiplicativa, se elaboró un modelo predictivo para determinar la relación beneficio-daño en función del riesgo de ECV.
RESULTADOS En cada cuartil, hubo una tasa inferior de eventos de la variable principal de valoración y no se observaron diferencias significativas en los EAG de cualquier causa en el grupo de tratamiento intensivo en comparación con el grupo de tratamiento estándar. Del primero al cuarto cuartil, el número necesario a tratar para prevenir los eventos de la variable principal de valoración se redujo de 91 a 38. El número necesario para causar un daño en cuanto a los EAG de cualquier causa aumentó de 62 a 250. El modelo predictivo mostró unos valores de la relación beneficio-daño (± EE) que aumentaban de manera significativa en el primero, segundo, tercero y cuarto cuartiles, de 0,50 ± 0,15, 0,78 ± 0,26, 2,13 ± 0,73, y 4,80 ± 1,86, respectivamente (p para la tendencia <0,001). En todas las comparaciones emparejadas posibles de los valores medios de la relación beneficio-daño entre diversos cuartiles, hubo diferencias significativas (p< 0,001).
CONCLUSIONES En el ensayo SPRINT, los pacientes con un riesgo basal de ECV menor mostraron un daño superior al beneficio con el tratamiento intensivo, mientras que en los pacientes con un riesgo superior, hubo un mayor beneficio. Junto con la guía para el tratamiento de la presión arterial de 2017 del American College of Cardiology y la American Heart Association, este análisis puede ser útil a los profesionales de la salud y los pacient es para la toma de decisiones respecto a la intensidad del tratamiento para el control de la presión arterial. (J Am Coll Cardiol 2018;71:1601–10) © 2018 American College of Cardiology Foundation. Publicado por Elsevier.